Reseña de «Un lugar soleado para gente sombría», de Mariana Enríquez
Doce nuevos relatos en los que se mezcla lo macabro con la cotidianidad.
RESEÑA
Lynnette Andújar
7/15/20241 min read
La autora argentina Mariana Enríquez, pone a prueba una vez más su fórmula de éxito en la que mezcla lo macabro y lo sobrenatural con lo cotidiano. Su nueva obra, "Un lugar soleado para gente sombría", busca transportar a sus lectores a una Argentina de atmósfera gótica y fantástica. Al igual que sus colecciones de cuentos publicadas anteriormente: Los peligros de fumar en la cama (2009) y Las cosas que perdimos en el fuego (2016), esta antología contiene doce cuentos.
Estos relatos continúan la voz distintiva que, con los años, ha posicionado a Enríquez como una de las autoras más sobresalientes dentro del género de la literatura de terror y fantasía. Publicadas bajo el sello de la editorial Anagrama y una portada del joven pintor chileno Guillermo Lorca García, titulada ‘La cama inglesa’, en la que un leopardo lame la cabeza de una niña que descansa plácidamente en su cama, estas historias exploran distintas sensaciones y situaciones cotidianas en las que lo sombrío e insólito se abre paso.
En estas casi 300 páginas, los muertos vagan por los barrios pobres y hasta tocan puertas en busca de atención. Las enfermedades, la locura, el deterioro del cuerpo y crímenes reales que nos son familiares a muchos, como el extraño caso de Elisa Lam en el Hotel Cecil de Los Ángeles, forman parte de su prosa llena de extrañeza y fenómenos paranormales. Mariana Enríquez propone un viaje en el que casas encantandas, pueblos desolados y la propia oscuridad interior son escenarios de encuentros con la sociedad contemporánea.